Si fuiste a nadar en albercas o playas con fines recreativos y regresaste con dolor en los oídos u oídos tapados aquí te damos algunos consejos.
Si fuiste a nadar en albercas o playas con fines recreativos y regresaste con dolor en los oídos u oídos tapados aquí te damos algunos consejos.
Durante esta época de verano es común acudir a darnos un chapuzón en las albercas o playas para divertirnos y apaciguar el calor. Sin embargo en algunas ocasiones esto puede ocasionar que nos quedemos con sensación de oídos tapados y/o agua dentro de los oídos. Incluso en algunas otras ocasiones se puede presentar dolor y comezón en los algunos días después de haber nadado.
Empecemos describiendo nuestro oído para estar más familiarizado con lo que sucede.

El oído se divide en 3 partes para su estudio, el oído externo (desde el pabellón auricular hasta la membrana timpánica), el oído medio (desde la membrana timpánica hasta el promontorio coclear) y el oído interno (que corresponde al caracol auditivo y del equilibrio).
En esta ocasión nos centraremos únicamente en el oído externo. El oído externo comprende la oreja propiamente y el conducto auditivo hasta llegar a la membrana timpánica. El conducto auditivo tiene una longitud aproximada de 2.5 cm y está recubierto de piel. Esta piel es gruesa en la porción más externa del conducto y contiene glándulas productoras de cerumen y folículos pilosos. En la porción más interna del conducto auditivo esta piel se hace cada vez más delgada hasta continuarse con el epitelio del tímpano.
Las glándulas sebáceas y apócrifas que se encuentran en la porción externa del conducto auditivo producen cerumen; una sustancia grasosa ligeramente ácida con un pH de 6 a 6.5 que recubrirá la piel subyacente, generando una capa protectora.

Nuestro oído una cueva de vida para las bacterias

Como en todas las superficies del cuerpo nuestro oído alberga una flora bacteriana de forma regular. De hecho en los estudios se han encontrado múltiples bacterias dentro del conducto auditivo y el cerumen. Las bacterias más comunes son Sthaphylococcus auricularis, Corynebacterias, estreptococos y enterococos. En algunas ocasiones podemos encontrar Pseudomona auriginosa y hongos.
¿Pero que sucede cuando el exceso de humedad de la alberca barre esa capa protectora de grasa en nuestro conducto auditivo?
La exposición del oído al agua, el rascado del conducto auditivo, el uso de hisopos o instrumentos para limpiar el conducto auditivo puede ocasionar mayor pérdida de la capa protectora grasa y una inflamación y daño en la piel del conducto auditivo. Predisponiendo a que las bacterias que hay en nuestro conducto ocasionen infecciones.
La otitis externa
La otitis externa también conocida como otitis del nadador es una infección del conducto auditivo de rápido inicio. Relacionada con la humedad o el trauma local a la piel del conducto. Tiene un inicio rápido alrededor de 48 horas o menos con síntomas de inflamación en el conducto auditivo externo de un solo lado, aunque pudiera presentarse en los dos.
Se presenta con mucha frecuencia entre los 5 y 10 años de edad sin embargo alrededor del 50% de los casos se ven en adultos de 20 a 50 años.
Los factores que la predisponen son:
- Remoción de la cerilla (cerumen)
- Uso de audífonos
- Uso de aparatos auditivos
- Conductos estrechos
- Condiciones de la piel (seborrea, psoriasis, dermatitis)
SÍNTOMAS:

Si fuiste a nadar en albercas o playas con fines recreativos y regresaste con dolor en los oídos u oídos tapados aquí te damos algunos consejos.
Durante esta época de verano es común acudir a darnos un chapuzón en las albercas o playas para divertirnos y apaciguar el calor. Sin embargo en algunas ocasiones esto puede ocasionar que nos quedemos con sensación de oídos tapados y/o agua dentro de los oídos. Incluso en algunas otras ocasiones se puede presentar dolor y comezón en los algunos días después de haber nadado.
Empecemos describiendo nuestro oído para estar más familiarizado con lo que sucede.

El oído se divide en 3 partes para su estudio, el oído externo (desde el pabellón auricular hasta la membrana timpánica), el oído medio (desde la membrana timpánica hasta el promontorio coclear) y el oído interno (que corresponde al caracol auditivo y del equilibrio).
En esta ocasión nos centraremos únicamente en el oído externo. El oído externo comprende la oreja propiamente y el conducto auditivo hasta llegar a la membrana timpánica. El conducto auditivo tiene una longitud aproximada de 2.5 cm y está recubierto de piel. Esta piel es gruesa en la porción más externa del conducto y contiene glándulas productoras de cerumen y folículos pilosos. En la porción más interna del conducto auditivo esta piel se hace cada vez más delgada hasta continuarse con el epitelio del tímpano.
Las glándulas sebáceas y apócrifas que se encuentran en la porción externa del conducto auditivo producen cerumen; una sustancia grasosa ligeramente ácida con un pH de 6 a 6.5 que recubrirá la piel subyacente, generando una capa protectora.

Nuestro oído una cueva de vida para las bacterias

Como en todas las superficies del cuerpo nuestro oído alberga una flora bacteriana de forma regular. De hecho en los estudios se han encontrado múltiples bacterias dentro del conducto auditivo y el cerumen. Las bacterias más comunes son Sthaphylococcus auricularis, Corynebacterias, estreptococos y enterococos. En algunas ocasiones podemos encontrar Pseudomona auriginosa y hongos.
¿Pero que sucede cuando el exceso de humedad de la alberca barre esa capa protectora de grasa en nuestro conducto auditivo?

La exposición del oído al agua, el rascado del conducto auditivo, el uso de hisopos o instrumentos para limpiar el conducto auditivo puede ocasionar mayor pérdida de la capa protectora grasa y una inflamación y daño en la piel del conducto auditivo. Predisponiendo a que las bacterias que hay en nuestro conducto ocasionen infecciones.
La otitis externa
La otitis externa también conocida como otitis del nadador es una infección del conducto auditivo de rápido inicio. Relacionada con la humedad o el trauma local a la piel del conducto. Tiene un inicio rápido alrededor de 48 horas o menos con síntomas de inflamación en el conducto auditivo externo de un solo lado, aunque pudiera presentarse en los dos.
Se presenta con mucha frecuencia entre los 5 y 10 años de edad sin embargo alrededor del 50% de los casos se ven en adultos de 20 a 50 años.
Los factores que la predisponen son:
- Remoción de la cerilla (cerumen)
- Uso de audífonos
- Uso de aparatos auditivos
- Conductos estrechos
- Condiciones de la piel (seborrea, psoriasis, dermatitis)
SÍNTOMAS:

- Dolor de oído moderado a severo (presente de días a semanas)
- Dolor que aumenta al tocar el oído
- Comezón en el oído
- Salida de líquido transparente del conducto que puede progresar a secreción viscosa y/o purulenta.
- Enrojecimiento de la piel del conducto y/o pabellón auricular
- Oído tapado
- Baja audición
- Salida de pus del oído
¿Cómo se trata y como se previene la otitis externa?
El primer tratamiento es la prevención
Es aconsejable evitar que la humedad en nuestros oídos y eliminar a toda costa cualquier posibilidad de lastimar o traumatizar nuestros conductos auditivos. Por lo tanto podemos usar tapones oclusivos para evitar la entrada de agua al conducto.
Es aconsejable retirar la humedad del conducto auditivo al terminar de nadar, pero no hacerlo con hisopos (repito NO USAR COTONETES). Podemos apoyarnos de una secadora y así eliminar la humedad con aire, sin traumatizar el conducto auditivo.
Existen también algunas gotas a base de alcohol y vinagre que tu otorrino puede recetar para eliminar la humedad y preservar la acidez de la piel.
Si a pesar de todos los intentos presentas síntomas de enfermedad, es importante acudir con un especialista en otorrinolaringología. Que realizara una serie de limpiezas del oído con equipo especial y recetara tratamiento en gotas y en algunas ocasiones antibiótico tomado según la severidad del caso.
Se debe evitar por completo el uso de lavados óticos pues esto aumentara la humedad y el trauma en la zona afectada así como evitar la “conoterapia” pues esto solo agravara el problema.
En este post pretendo mencionar algunos de los mitos más frecuentes respecto a la Bichectomia y así ayudarte a entender mejor esta cirugía.

La Bichectomia es una cirugía en la cual se extraen las bolsas de Bichat (panículo adiposo de Bichat). Es una cirugía ampliamente solicitada y existen muchos mitos a su alrededor.
En este post pretendo ayudarte a tener una mejor información respecto a este procedimiento.
MITO 1
¿Si me hago la Bichectomia se me va a colgar la cara?
Respuesta: Falso.
Las bolsas de Bichat forman parte de una serie de depósitos grasos de la región facial. En la cara tenemos varios compartimentos grasos, algunos de ellos están en contacto estrecho con la piel, sin embargo, las bolsas de Bichat se encuentran en una capa profunda de la cara y no tienen contacto alguno con la piel por lo cual no dan soporte a la misma.
De hecho, los compartimentos grasos y todos los tejidos blandos de la cara tienden a caerse con los años; pues empieza a haber un debilitamiento de los ligamentos que fijan los tejidos hacia el hueso y el efecto de la gravedad va surtiendo su efecto.


La Bichectomia es una cirugía en la cual se extraen las bolsas de Bichat (panículo adiposo de Bichat). Es una cirugía ampliamente solicitada y existen muchos mitos a su alrededor.
En este post pretendo ayudarte a tener una mejor información respecto a este procedimiento.
MITO 1
¿Si me hago la Bichectomia se me va a colgar la cara?
Respuesta: Falso.
Las bolsas de Bichat forman parte de una serie de depósitos grasos de la región facial. En la cara tenemos varios compartimentos grasos, algunos de ellos están en contacto estrecho con la piel, sin embargo, las bolsas de Bichat se encuentran en una capa profunda de la cara y no tienen contacto alguno con la piel por lo cual no dan soporte a la misma.
De hecho, los compartimentos grasos y todos los tejidos blandos de la cara tienden a caerse con los años; pues empieza a haber un debilitamiento de los ligamentos que fijan los tejidos hacia el hueso y el efecto de la gravedad va surtiendo su efecto.

Es cierto que con el avance de la edad la grasa de los distintos compartimentos faciales tiende a atrofiarse, sin embargo esto no quiere decir que el hecho de no remover las bolsas de Bichat tiene un efecto protector contra el envejecimiento. Incluso, la historia natural del envejecimiento facial conlleva que tanto los compartimentos grasos de la cara como las Bichat se cuelguen y al final, las bolsas de Bichat causen un efecto acumulativo en la formación de los llamados Jowls.

MITO 2
¿Si me retiro las bolsas de Bichat puede alterar de alguna manera las funciones de mi organismo?
La únicas funciones conocidas de las bolsas de Bichat son 1.- dar volumen a la cara 2.- disminuir la fricción muscular entre los músculos faciales (durante la succión mayormente).
Por lo tanto si se retiran las bolsas de Bichat no causará ninguna alteración en la fisiología y función adecuada de tu organismo.
MITO 3
¿Cualquiera es candidato a la Bichectomia?
Respuesta: Falso
Es muy importante establecer cuáles son los objetivos que deseas lograr en tu cara con esta cirugía. Aunque todos tenemos bolsas de Bichat y teóricamente cualquiera se las puede quitar. Los resultados estéticos son muy variables en cada persona, por eso, es imprescindible que expongas con tu cirujano cuales son los objetivos que te gustaría alcanzar antes de realizártela.
A través de esta evaluación podrás saber si necesitas un procedimiento distinto o algún procedimiento complementario para tener los mejores resultados.
Esta cirugía es ideal para el paciente que tiene un rostro redondo con un volumen aumentado en la región de las mejillas.
MITO 4
¿Esta cirugía me ayuda a bajar de peso?
Respuesta: Falso
Claro que esta cirugía puede formar parte de tu plan durante ese régimen de ejercicio y dieta que estas realizando. Sin embargo, esta cirugía no ayuda a adelgazar toda la cara; por el contrario ayuda a adelgazar y disminuir el volumen de un área muy específica de la mejilla.
Al disminuir el volumen de esta área nos ayuda a dar un efecto de afilamiento y alargamiento del rostro similar a cuando las mujeres se maquillan el área de los cachetes.
En este sentido, si se quiere adelgazar todas las áreas del rostro este no es el procedimiento para ti.
MITO 5
¿La Bichectomia solo es para personas con sobrepeso?
Respuesta: Falso
La Bichectomia se recomienda para las personas que tienen muchos cachetitos, más si a pesar de todos los esfuerzos no disminuyen de tamaño. Se recomienda en personas que tienen un rostro redondo y les gustaría que se vea más alargado, independiente del peso corporal.

MITO 6
¿La Bichectomia es una cirugía muy fácil y la puede hacer cualquier personal de salud?
Respuesta: Falso
La remoción de las bolsas de Bichat no deja de ser una cirugía. Por lo tanto, debe ser realizada por un Cirujano con experiencia.
Es cierto que es una cirugía relativamente rápida y sencilla, sin embargo no está exenta de complicaciones. La anatomía de la cara es bastante compleja y en la zona de las bolsas de Bichat existen estructuras anatómicas muy importantes que tu médico debe conocer.
Por ello, es importante que el Cirujano que te la realice cuente con la experiencia y las destrezas necesarias para hacerla.
Recuerda que en México y en Estados Unidos puede realizarla un Otorrinolaringólogo, un Cirujano Plástico o un Cirujano Maxilofacial. Es importante que cualquiera de ellos este Certificado ante el Consejo de su especialidad.
A continuación conoce 7 formas de identificar si tienes el tabique nasal desviado.
El tabique nasal o septum es una estructura compuesta por cartílago y hueso que separa una fosa nasal de otra.
Su desviación está asociada con traumatismos en la región facial. Estos pueden ser desde el parto o durante la vida adulta.

A continuación les mencionare algunos signos o síntomas que pueden estar presentes si tienes el tabique desviado.
- Nariz tapada: La obstrucción nasal o nariz tapada es un síntoma predominante en la desviación del tabique nasal. Tiende a ser unilateral sin embargo en algunos casos se presenta de ambos lados, esto puede ser por un crecimiento excesivo de los cornetes nasales secundario a la desviación del tabique.
- Ronquido: Los pacientes con tabique nasal desviado puede presentar ronquido, asociado a un sueño poco reparador y cansancio diurno excesivo. Esto puede provocar dolores de cabeza, irritabilidad y mal humor entre otras cosas.
- Sinusitis: Los pacientes con el tabique desviado tienen más probabilidades de padecer infecciones respiratorias tales como sinusitis. Esto, secundario a una alteración en el drenaje normal de moco nasal.
- Dolor de cabeza: Los pacientes con tabique desviado tiene mayor probabilidad de padecer sinusitis, ronquido y sueño poco reparador. El dolor de cabeza es uno de los síntomas asociados a estas enfermedades.
- Infecciones de oído: El tabique nasal desviado puede alterar el drenaje normal de moco a nivel de la trompa de Eustaquio (conducto que comunica el oído con la nasofaringe). Esto predispone a una disfunción de este tubo con riesgo de enfermedades recurrentes en el oído.
- Sangrados nasales: Un tabique alineado que conserva su forma normal, permite la entrada de aire a través de ambas fosas nasales sin complicaciones. Cuando el tabique se encuentra desviado genera que el aire entre de forma más difícil a través de un orificio nasal, generando turbulencia y sequedad nasal en dicha zona. Esto puede predisponer a que algunos vasos sanguíneos se dañen y se exprese como un sangrado nasal.
- Desviación de la pirámide nasal: La desviación de la pirámide nasal es un signo común en el tabique desviado secundario a un trauma nasal intenso. Puede estar asociado a una fractura nasal antigua y a nariz torcida.
Es importante mencionar que el tabique no solo se refleja en la porción externa de la nariz, sino también, en la porción interna. Por lo tanto, tener una nariz derecha no descarta que por dentro exista una desviación del tabique nasal. De hecho, las desviaciones del tabique nasal más frecuentes son por dentro de la nariz y no ocasionan una deformidad nasal evidente en todos los casos.
Si tú tienes alguno de estos signos o síntomas y te gustaría corregirlos. Es recomendable que acudas con un otorrinolaringólogo.